miércoles, 18 de noviembre de 2009

“El Gran Invento”

Desde hace un mes soy un reo de esta prisión, simplemente por adeudar unas cuantas monedas a uno de los más grandes comerciantes de todo París, según la milicia voy a ser condenado a muerte, en la guillotina.

Es 1793, debía esas monedas porque robaron mi mercancía días antes de ser traído a esta prisión, también soy comerciante pero uno muy pequeño a comparación de quien me presto lo que adeudaba y algún pillo de los muchos que vivían en París robo todo lo que tenía entonces para poder pagar ciertos gastos necesitaba dinero, dinero que ganaría con la mercancía pero después de ser robada mi opción era un préstamo, pensando que entre comerciantes nos entenderíamos, pero me atrase con el día en que debía pagar y aquí estoy, ahora ese pequeño error lo pagare con mi vida, cuando debería ser quien robo mi mercancía, aunque él esta feliz disfrutando de la libertad y de la vida; para mi esa sensación murió hace un mes, por eso creo que este gobierno es el más injusto que había conocido.

Con el tiempo que he vivido aquí se que el inventor de la famosa guillotina fue Joseph- Ignace Guillotin, diputado por el tercer estado; algo famosa porque desde el año anterior, cuando la guillotina tuvo su primera victima, un tal Pelletier, se ha vuelto más famosa que cualquier rey que haya tenido la corona francesa, ha cortado miles de cabezas desde reos como yo hasta gente perteneciente al clero y la nobleza.

Pero me falta nombrar la cabeza más importante cortada también por la guillotina: la del rey Luis XVI, por haber gobernado tan mal a Francia y por todas las veces que se fugó creyendo que así sobreviviría.

Todas estas muertes de se dieron por una condena que para los políticos resultaba la forma más sencilla de dar fin al problema, se convirtió en su arma para finalizar con los revolucionarios, todos aquellos que habían hecho parte del régimen del terror y cometieran cualquier delito. Por esto creo que es un “gran invento”, porque no creo que esa sea la manera de darle final a los problemas como el mío, por ejemplo, y ninguno otro, deben existir otros tipos de castigo para las personas, dependiendo de su crimen, pero nunca la muerte.

REGIMEN DEL TERROR

El régimen del terror es un lapso de tiempo dentro de la revolución francesa, que se lleva a cabo en el año 1793 a 1794, en donde lo que se pretendía era instrumentar medidas de terror para reprimir las actividades contrarrevolucionarias, en este periodo ejecutaron aproximadamente 1.300 personas entre ellos gente humilde y trabajadora, así mismo muchos complots de especuladores y reaccionarios en París y otras partes de Francia. El régimen del terror estaba al amparo del Comité de Salvación Pública encabezado por el dirigente Maximilien Robespierre, el cual era una de las organizaciones de la rama ejecutiva en Francia, y su deber era apoyar y reforzar la acción del Comité de Seguridad General.
Durante el gobierno del régimen del terror se destacaron varias medidas tanto económicas como sociales, religiosas y culturales.
En el ámbito económico, el régimen del terror tuvo un objetivo siempre claro y fue asegurar el abastecimiento tanto de la ciudad de París como del ejército, para que así no se fuese a generar una clase de rebelión popular. Aunque las cosas se complicaron el la primavera del año 1973 ya que la hambruna y los bajos recursos amenazan de muerte a la población, Para salvar la situación, la Convención decide limitar el precio de ciertos productos en mayo del mismo año.
En cuanto a las medidas sociales, este periodo estableció varios cambios que fueron oportunos y satisfactorios para unos, pero muy perjudiciales para otros, como lo fueron: Abolición de la esclavitud, Disminución del plazo que ha de transcurrir entre el divorcio y el nuevo matrimonio, Reparto igualitario de las herencias que suprime los privilegios de los primogénitos, Censo de los indigentes que percibirán ayudas procedentes de los bienes confiscados. Se organiza la atención a los pobres a domicilio.
Las medidas religiosas y culturales en este lapso de tiempo, no iban a favor de la iglesia, así pues, Se desarrolla una campaña de descristianización en la capital y en varias provincias, 20 000 clérigos abandonan el sacerdocio y 5000 se casan. Por tanto la iglesia también toma medidas drásticas; El arzobispo de París, Jean-Baptiste Gobel, y miles de sacerdotes se niegan a prestar juramento a la Constitución. Muchas iglesias son desacralizadas y convertidas en almacenes o transformadas en templos de la Razón. También en este año se crea el calendario republicano, se instaura la fiesta de la Razón y la fiesta de Ser Supremo
Robespierre, Procedente de la pequeña nobleza del norte de Francia, se hizo abogado, fue representante del tercer Estado, defensor de las ideas liberales y democráticas; un ejemplo claro fue cuando prohibió la reelección de los diputados para que así se renovara constantemente el personal político y ésta no se estancara sólo en un plan de trabajo. Fue un hombre muy inteligente y templado, llevó su rigor moral y su fidelidad a los principios hasta el fanatismo.
En conclusión el régimen del terror acabó con muchas vidas inocentes, a veces condenadas por tan sólo una sospecha, pero también en este periodo se acabó con grandes conspiraciones contrarrevolucionarias, el papel de Robespierre que gracias a un golpe de estado toma el poder absoluto, fue fundamental en este año, siendo catalogado como extremista por la cantidad de muertes durante su gobierno y asimismo generando violencia entre los habitantes, una coalición de diputados persigue la cabeza del extremista y consiguen el cese y arresto de Maximilien, fue guillotinado junto con 21 de sus partidarios en la plaza de la Revolución, poniendo fin al Terror y dando paso a un periodo de reacción hacia posiciones moderadas en París de 1974

domingo, 25 de octubre de 2009

MEMORIAS… LA LOUISETTE



En estos tiempos de lamentación y arrepentimiento, en el que la tierra se agita sola y la humanidad ha perdido su cordura, todas las noches me pregunto por qué aún sigo vivo y sin que la humanidad me juzgue, sólo desde arriba me observa Dios. Ya perdí la cuenta y mis zapatos aún tienen el rastro de la sangre y heden como tal. Una noche más desvelada, la conciencia no me permite descansar en paz. Luego de un largo día “trabajando” para el rey, llego a mi hogar y al recostarme en mi lecho cierro los ojos, pero de inmediato recuerdo los rostros aterrorizados de tantas personas suplicando, uno tras otro.

Buscando, recorriendo pueblos distantes, sin más ayuda que la de un asno, encontré varios documentos, que me ayudaron a comprender la historia de mi cruel oficio. Descubrí que en el año 1789 el médico Joseph-Ignace Guillotin, diputado por el tercer estado, presentó una moción que sustentaba el humanizar y modernizar la aplicación de la pena de muerte mediante una máquina de cortar cabezas, lo que para él representaba una idea compasiva y democrática. De alguna forma, esta idea tenía algo de bueno, cualquier ciudadano sería ejecutado de forma más piadosa, ya no tendrían que sufrir los presos y acusados, muertes lentas, dolorosas, a golpes de sable sin afilar. La muerte ajusticiada ya no sería exclusividad de la clase privilegiada. La asamblea legislativa encargó la fabricación de la primera Guillotina para 1792 y luego 83 ejemplares más al constructor alemán Tobías Schmidt.

Ya se lo podrán imaginar, una gigantesca cuchilla de acero de aproximadamente 60 kilos que se desliza por un bastidor llamado sombrero de 2.80 metros de altura. En la parte inferior un cepo circular o luneta, dónde el condenado apoya el cuello… y llega la hora de hacer mi trabajo, suelto la cuchilla a la altura de la cuarta cervical, así, con una rapidez extrema Dios o el diablo han cobrado una vida más, y a la vez un poco de mi tranquilidad. Recuerdo, la primera ejecución que realicé usando la guillotina o la louisett, con angustia me despierto las pocas noches que logro conciliar el sueño con la mirada fija de Petellier, el primer delincuente común víctima de este artefacto. Todas las excusas eran válidas para ejecutar seres humanos, adeptos al antiguo régimen, revolucionarios, diputados, radicales, acaparadores, ateos, sacerdotes, desertores y delincuentes comunes. Según los rumores de los franceses, esto acabará con más de 30.000 decapitados, y en mi cabeza y mi conciencia un coro de suplicas jamás me permitirán descansarsar.

viernes, 18 de septiembre de 2009

¿Peste?, Negra.


Dicen los filósofos que la historia de la humanidad es repetitiva. Hace miles de años la tierra se congeló en una etapa conocida como la Era del hielo y probablemente se volverá a congelar; las modas se repiten, la misma ropa, el mismo calzado e inclusive los mismos cortes de cabello; hoy, la tierra se calienta como estuvo caliente hace millones de años y probablemente se repetirá. De esta forma la sangrienta pero increíble evolución de la humanidad se traduce en repeticiones, para llegar a convertirnos en los seres racionales que somos, quienes tratamos de buscar soluciones a todo lo que se interponga en el camino evolutivo. Ni siquiera las enfermedades han podido acabar con la raza humana, por el contrario han dejado más secuelas que la misma naturaleza autodestructiva del hombre. Actualmente, vemos con gran preocupación la forma en que virus como el AH1N1 afectan a la humanidad, y ya cientos de personas han fallecido a causa de éste, y eso que contamos con todos os avances tecnológicos en medicina y preventivos que conlleva la modernidad. Pero, ¿cómo fueron las enfermedades con las que lidio la población en la edad media o el renacimiento? En este caso podemos citar La peste negra ó también conocida como Peste bubónica, causó la muerte de entre el 40% y el 90% de los infectados. Se le concedió éste nombre ya que los vasos capilares de cualquier parte del cuerpo explotan dejando marcas subcutáneas color negro, a pesar de que el principal foco dónde se reproducía la infección era el cuello, las axilas y la ingle. Era contagiada por una pulga que contrajo el virus originalmente de las ratas, infectando al ser humano. Aunque no se conocen cifras exactas, y las que se suponen pueden llegar a ser alarmantes, se conoce el año de 1507 como El año de la peste, pues al parecer fue en ese año dónde la epidemia cobró más vidas, con tal desgracia, que luego de la peste la humanidad se vio azotada por hambruna general. Ni aún en 1530 concluía la epidemia, inclusive hasta hace pocos años alcanzamos a ver los estragos que generan, entre los últimos casos se registran uno en la India en 1994 y dos casos más en México del año 2002. A pesar de que originalmente este virus infectocontagioso se originó en Europa las embarcaciones con mercancía se encargaron de traerlo a América. A pesar de todo, se dieron cosas favorables, gracias a la epidemia, se impulsó la tecnología del papel y los manuscritos, en vista del afán por preservar el conocimiento que ya habían adquirido. Los sobrevivientes aumentaron sus ingresos, la propiedad privada, heredaron toda clase de artículos como dinero, ropa, artículos de hogar y tierras; pues la enfermedad no diferencióclases sociales, convirtiendo ésta época en una de las de mayor consumo en la historia, a costa de las víctimas de la peste negra.

jueves, 17 de septiembre de 2009

Enrique VIII


Enrique Tudor, soy yo o más conocido como el rey Enrique VIII de Inglaterra desde 1509, para ser sincero he sido uno de los reyes más polémicos que haya tenido Inglaterra en el siglo XIV, jajaja haber me casado seis veces, fue algo que nadie vio en la época del renacimiento jajaja.

Vengan y les contaré mi historia: Nací en Greenwich, Inglaterra en 1491, fui el segundo hijo de Enrique VII y llegue al trono ya que a mi hermano Arturo la muerte le llegó primero. Llegue al poder a los 18 años, todos pensaron que seria uno de los mas grandes reyes, porque podría lograr cosas con mis grandes ideas, lamentablemente decepcione a más de uno en toda Inglaterra, ya que por mis fracasos amorosos hice que mis políticas y mi forma de mandar en Inglaterra cambiasen, ja pero eso ya que importa, logré ser inmemorable.

Para iniciar con mis amores les contare que me case con Catalina de Aragón; hija de los reyes católicos; siendo ella la viuda de mi hermano Arturo, así que para lograr mi matrimonio con ella tuve que pedirle permiso al Papa, hasta que el cedió logre mi unión con Catalina, duramos bastante, no lo puedo negar, pero llegó el momento en que me canse de ella por no poder darme hijos, siempre nacían muertos; el único que nació vivo fue una niña así que la llamamos María. Ya estaba tan cansado de Catalina que busque otra mujer, fue cuando encontré a Ana Bolena, una mujer bella y sensual, hermana de una mujer que conocía ya algún tiempo. María Bolena.

Ana Bolena me prometió un hijo varón siempre y cuando yo dejara a Catalina y la convirtiera a ella en mi esposa y reina de Inglaterra, yo en mi afán y deseo de tener un heredero a la corona le dije que si, busque la manera de anular mi matrimonio con Catalina, pero me encontré con más de un problema, les recuerdo que para poder casarme con ella tuve que pedir un permiso especial y por eso el Papa no permitía un matrimonio con Ana Bolena (el renacimiento era un época donde el divorcio estaba prohibido por la iglesia). Además estaba Carlos V sobrino de Catalina y sobretodo emperador del sacro imperio y por lógica él no permitiría que alguien insultara a un miembro de su familia.

Sin embargo, así lo hice, me divorcie aunque ese proceso duró varios años, llevado a cabo por mi ministro Thomas Cromwell, quien también seria la persona que me diría la idea de crear en Inglaterra una institución nueva independiente de la iglesia católica, es decir, la iglesia anglicana en la cual yo podría casarme con Ana Bolena sin ninguna complicación, eso si siguiendo a Dios pero no a la iglesia, demostrando la lealtad al hombre renacentista.

Tiempo después junto a Ana Bolena, me di cuenta que ella no era la mujer que yo esperaba, quien me dio otra hija a quien llamamos Isabel I; Ana Bolena Murió decapitada por traición y adulterio, fue entonces que después de su muerte estuve con Jane Seymour, muriendo justo en el parto. Tres años después buscando a la mujer perfecta para mí, encontré a Ana de Cleves, me case con ella formando así una alianza con Alemania, pero al final me separé de ella. Mi siguiente esposa fue Catherine Howard y en poco tiempo me separe de nuevo, como sexta y última esposa estuve con Catherine Parr, con ella dure hasta el día de mi muerte en enero de 1547.